Elegancia, calidad y prestigio. Estas son las principales características de la firma Montblanc y, sobre todo, las cualidades que se encuentran grabadas en la mente de sus clientes y de los amantes de los artículos de lujo por más de cien años. Fundada en 1906, en la ciudad alemana de Hamburgo, Montblanc se ha posicionado como una de las marcas más reconocidas en el rubro a nivel internacional y, a pesar del paso del tiempo, su popularidad no se ha desvanecido.

 

Claus-Johannes Voss, Alfred Nehemias y August Eberstein, los fundadores, fueron pioneros en la fabricación de plumas estilográficas. Con la aparición de la pluma Montblanc Meisterstück, considerada por muchos como la mejor de todos los tiempos, fue que inició el gran éxito mundial de la marca. Montblanc siempre se ha proyectado como una firma prestigiosa, no sólo por el nombre de su legendaria pluma, que en español se traduce como “obra maestra”, o por la referencia a la cumbre más alta de Los Alpes europeos, sino también por la seguridad que demuestra y que influye fuertemente en su público objetivo.

Pluma estilográfica Meisterstück, un clásico de Montblanc

 

No obstante, la estrategia de marca de Montblanc es la razón más importante por la que tiene una magnífica reputación hasta ahora. Aunque la extensión de marca es una estrategia difícil de ejecutar, a la firma le ha funcionado bastante bien. En la actualidad, no sólo fabrica sus legendarias plumas estilográficas y bolígrafos, sino que también lanza al mercado diversos productos de escritura, piel, viaje, relojes, accesorios de vestir e, incluso, new tech, lo que le permite llegar a nuevos targets. Esto se debe a la solidez de su mensaje y de su esencia, a su capacidad de adaptación y a la fuerte conexión emocional que tiene con el público. Como describe la firma en su página web, sus productos “se convierten en compañeros para un estilo de vida que le acompañará a usted y a generaciones futuras”.

 

Además, Montblanc se encuentra en una constante búsqueda de rejuvenecimiento de marca. Para ello, se utiliza la imagen de artistas globales, como es el caso de Hugh Jackman, y, de acuerdo con Francesc Carmona, representante de la marca en España, se emplea una serie de microacciones enfocadas al cliente con el fin de atraerlo a las tiendas, gracias a una amplia base de datos de la firma.

 

Toda la historia detrás del salto a la fama y de la evolución de Montblanc como marca líder de artículos de lujo es una gran fuente de inspiración y, a su vez, nos demuestra la gran importancia de innovar y permanecer en el topmind de nuestro público para seguir teniendo relevancia en el mercado frente a las nuevas necesidades de los consumidores.